10.4.12
días
Hay vagones como salas de espera de hospitales,
sobrellevando enfermedades y sufrimiento
con ansiedad de raíles infinitos:
paralelamente.
Y días rotos,
rotos como los cuerpos
de pensamientos rotos,
descosidos,
de orillas enfrentadas por la violencia de un río,
siempre corriente abajo,
abajo.
Y días nuestros,
como las manos nuestras,
como la piel y el agua que mana de nosotros,
la boca y los oídos y los ojos que somos.
Que no olvidamos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
De mi Banco de... Para que no me olvi... De Pancho Salmerón ...
-
Non teñas medo de mentir non é xa tempo a procurar amarre firme a este carocho sen alento, deixa estar. Pero non d...
-
Los senderos se reparten como venas por territorios propios en los paisajes para guiarnos en nuestros paseos, pero esta pr...
Incluso hay días que no sabría yo cómo definir porque me falta sabiduría o intuición o palabras para calificarlos. ¡Menos mal que son los menos! Pero "haber haylos" como decimos , también, en nuestra tierra astur. Minervina.
ResponderEliminar