20.7.10

fin




Fue llenando de tanta preocupación sus movimientos que olvidó el fin que los guiaba, olvidó la jugada, taponó las posibilidades de salida con sus miedos, sus reproches, sus rencores, y quedó para siempre atrapada en el tablero siendo peón del juego de los otros.

1 comentario:

                       De mi Banco de...              Para que no me olvi...              De Pancho Salmerón           ...