5.9.10

transparencias

Ella apoyo la bici en la barandilla del puente y se tiró sin medir aquel vacío que la separaba del agua, en silencio. Ya no volvió a salir. Corrí hacia allí sin pensar y al entrar en el puente, no sé por qué, toqué la barandilla y no solté su tacto hasta el lugar en que estaba la bicicleta. El agua, la distancia, la noche, luces en el río, al fondo el respirar de la ciudad y nada más, la barandilla fría y nada más... Recuerdo aquella noche y vuelvo al mismo sitio. No sé por qué lo hice, estaba muy oscuro, la chica no salió y yo no sé nadar, pensé que para el largo viaje que ella había elegido no le vendría mal la bicicleta...

3 comentarios:

  1. E non quedaches coa bicicleta?

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  2. Curioso, é a segunda fotografia que vejo hoje de uma bicicleta "afogada" na água! Como se fosse muito normal... :)

    Beijocas!

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                       De mi Banco de...              Para que no me olvi...              De Pancho Salmerón           ...